La Virgen del Silencio, La Magdalena y el Santiago.

La Agrupación de San Pedro Apóstol, a lo largo de su dilatada historia, ha sido la responsable de procesionar durante diferentes periodos de tiempo otros tercios que precedían a imágenes californias en las procesiones de Martes y Jueves Santo. A continuación, se pueden leer los escritos elaborados por el mayordomo Gabriel Garrido Romera a este respecto. Escritos curiosos y no demasiado conocidos, al menos en detalle. Muchas gracias Gabriel por tu inestimable colaboración.

 

Los sanpedristas con la Virgen del Silencio el Jueves Santo.

Desde 1928 salía, el Jueves Santo, la procesión del Silencio con un solo trono, el Ecce Homo, que no era otro que el Cristo del Prendimiento en esa advocación. A partir de 1944 se decide sacar una Virgen cerrando procesión. Esa imagen sería una Dolorosa de Sánchez Lozano que poseía, desde los años 30, en su capilla, el Hermano Mayor, Marqués de Fuente el Sol, y que prestó para el evento. El trono fue el del Ósculo al que se le agregaron unos faroles, a ambos lados, regalo del Hermano Mayor, y unas velas delante de la Virgen.

 

Primera salida de la Virgen del Silencio en 1944.

 

Como se pidió, por parte de la cofradía, que esta “Virgen del Silencio” la procesionaran penitentes con túnica y capuz negro, sólo los sanpedristas cumplíamos, por aquella época, esas condiciones por lo que, durante algunos años, fuimos los encargados de procesionar a la que se conocía como “Virgen del Silencio”. Añadir, como anécdota, que el sudarista era Francisco Abad Benito - Penitente Mayor de San Pedro -. Además, para ese evento encargamos unos escapularios de la Virgen.

Salimos con hachotes de cera. Nuestro vestuario era: túnica y capuz negro, con nuestro cordón blanco y nuestras sandalias negras, calcetines y guantes negros, más el mencionado escapulario.

San Pedristas, todo de negro, con el escapulario de la Virgen del Silencio - Jueves Santo  1944.

 

Virgen del Silencio de Sánchez Lozano.

 

Esta imagen sólo procesionó, como Virgen del Silencio, en 1944 y 1945. Al año siguiente, con la llegada de la Virgen del Primer Dolor de Mariano Benlliure, la imagen que pasó al Silencio fue la de Pérez Comendador, y ya nunca abandonaría esta procesión.

En 1947 la Virgen del Silencio, de Pérez Comendador, salió sobre el nuevo trono de la Flagelación  y  nuevamente procesionada por San Pedristas. Pero a partir de aquí un cambio comenzaba a producirse: al crearse nuevas agrupaciones, algunas de ellas se iban sumando a procesionar a la Virgen. Consecuencia de esto fue que, con el paso de los años, había menos de los nuestros y más del resto de agrupaciones.

 

1947 - La Virgen del Silencio, de Pérez Comendador, sobre el nuevo trono de la Flagelación.

Y con esta situación llegamos al final de la historia que se entrecruza, en 1957, con la Magdalena del Jueves Santo, relatada en capitulo aparte.

En esos años; casi todos los san pedristas pasaron a la Magdalena, pero todavía quedaban algunos procesionando a la Virgen del Silencio. Esto propició que, en 1959, estuviéramos a punto de no salir y le pidiéramos, por escrito, a la cofradía se definiera sobre en cual, de estas dos imágenes, teníamos que centrar nuestros esfuerzos. Al final salimos en las dos. Pero fue el último año de la Magdalena. En cuanto a la Virgen; algunos siguieron procesionándola – se le había cogido cariño con el paso de los años - . La historia acabó en 1964, veinte años después, cuando la agrupación de la Virgen se hizo cargo de dicha imagen...y pasó a llamarse Virgen de la Esperanza.

 

La Magdalena a los pies de la Cruz.

En 1956 era Hermano Mayor de la cofradía california; D. Francisco Celdrán, magnate de las minas. Creó una nueva procesión que se llamó de “Los Mineros”. Concebida para salir en Sábado Santo, por determinadas razones que no vienen al caso, acabó saliendo, ese primer año, el domingo de Resurrección a la una de la madrugada. San Pedro, no salió ese año y se incorporó a la misma al año siguiente. Tras muchos avatares, con los marrajos, por el día elegido, se decidió sacarla definitivamente el Jueves Santo. En 1957 nuestra agrupación sale en la procesión de Los Mineros, el Jueves Santo, con un nuevo trono; “La Magdalena a los pies de la Cruz”. El 13 de abril de 1957, Sábado de Pasión, reseña “El Noticiero” que; la mencionada procesión pasa al Jueves Santo, y que se estrenará un nuevo trono, La Magdalena a los pies de la Cruz, que procesionaran los San pedristas. Este nuevo pasaje, procesionado por San Pedro, sale con el sudario y el trono del Ósculo. Hay que indicar que, en Los Mineros, se hicieron muchas combinaciones con intercambios, de tronos, capas y sudarios, entre distintas agrupaciones. Nosotros vestíamos una capa de color plomo - que bien podría ser la “gris perla” de La Samaritana -, y nuestras capas negras las vestía la agrupación de la Virgen,  - conservamos fotos que así lo atestiguan -. Estas combinaciones, al parecer, se hicieron para darle a esta procesión un colorido que la distinguiera del recogimiento del Silencio. Se buscaba, seguramente, que ninguna agrupación fuera totalmente de negro. 

Pero ese año hay algo que ningún historiador comenta: la imagen de la Magdalena, en 1957, no es la de García Talens, pues no llegaría hasta el siguiente año, si no la hebrea de Sánchez Araciel que va arrodillada, delante de la borrica, en el trono de “La Entrada de Jesús en Jerusalén”. Esto fue corroborado por san pedristas, que salieron en la procesión, y lo recordaban, aunque vagamente. Lamentablemente no hemos encontrado fotos de esta imagen con la Cruz.

 

Hebrea, de Sánchez Araciel, del trono de la Entrada de Jesús en Jerusalén, que hizo de Magdalena a los pies de la Cruz en 1957.

 

Tercio de San Pedro, con el sudario y trono del Ósculo, que desfiló el jueves santo de 1957. Podemos observar que las capas tienen color plomo, como así lo hacia constar el comentario, a pie de foto, de donde fue extraída.

 

En 1958 nuestra agrupación desfila el jueves santo ya con nuestro sudario al que, Dª. Ascensión Espinosa le tapó la tiara y el gallo con una Cruz vacía...y seguimos con el mismo vestuario, y las capas color plomizo.

 

1958.

 

Pero este año también se incorpora la Magdalena de García Talens que había llegado, en la Cuaresma de 1958, junto al Cristo de los Mineros.

 

Imagen de la nueva Magdalena.

 

Trono del Ósculo con la Magdalena, de García Talens, a los pies de la Cruz en 1958.

 

Sudario de San Pedro en Los Mineros de 1959.

 

En 1959 estuvimos a punto de no salir, por unas diferencias con la cofradía, según cartas cruzadas, entre ambas, que se encuentran en nuestros archivos. Pero al final salimos y lo hicimos igual que el año anterior.

 

  1959 Magdalena a los pies de la Cruz.

Este año fue el último año que la Agrupación de San Pedro sacó a la Magdalena. A partir de 1960 se unifican la procesión de Los Mineros con la del Silencio. Nuestra agrupación ya no quiso formar parte de ella. Uno de los motivos, entre otros, fue que durante años, y desde 1944, sacábamos también a la Virgen del Silencio...

 

Agrupación de Santiago bajo el patrocinio de San Pedro.

En 1972 se consiguió uno de los viejos deseos de nuestros mayores. Preocupados porque los jóvenes, que habían dejado de salir en los hebreos,  y aún no tenían sitio en San Pedro, no se aburrieran, y tuvieran continuidad, se concibió tener un tercio “intermedio” que posibilitara que esos chicos no se perdieran, y su ilusión se mantuviera intacta hasta dar el salto definitivo. Para conseguir todo esto se pensó en la imagen de un apóstol, ligado a Cartagena, que había salido de una forma intermitente desde su fundación, y que se había dejado de procesionar... ¡el Santiago!. 

El 15 de enero de 1972 tuvo lugar la comida de constitución de la Agrupación de Santiago en el Hotel Restaurante Agny de La Palma. Se reunieron  más de 30 directivos san pedristas y personas de reconocido prestigio en nuestra ciudad. Se nombra: Presidente a D. Pedro José Sánchez Solé, Vicepresidente; D. Francisco Abad Benito, siendo directivos; D. Francisco Vera Sánchez, D. Juan Montiel Barranco, D. Francisco Cerón Albacete, entre otros.

Los ensayos, dirigidos por D. Francisco Abad y D. Rafael Checa, comenzaron el 20 de febrero en la fábrica de lámparas, propiedad de D. Damián Romero, en Santa Lucía.

Los colores del vestuario fueron elegidos por Francisco Abad – túnica de terciopelo rojo, capuz y capa de raso blanco, con la cruz de Santiago en fieltro rojo, y fajín de armiño blanco – los colores de la Orden Militar de Santiago -. El vestuario fue confeccionado por Ascensión Pérez de Espinosa.  

El hachote estaba compuesto por una simple caña metálica con una tulipa blanca con la Cruz de Santiago impresa a fuego, obsequio, junto con las tulipas del trono, del san pedrista Damián Romero.

El trono era el antiguo de San Pedro, que en 1943 realizó Rafael Terón, restaurado y dorado por Rafael Eleuterio, quien también esculpió la nueva imagen de Santiago. En la actualidad aún perdura el templete de ese trono.

Trono de San Pedro en 1943 con el templete que, actualmente, todavía lleva el trono de Santiago.

 

1972 – Trono de Rafael Terón restaurado y dorado por Rafael Eleuterio con la imagen que esculpió.

 

     Imagen de Santiago obra de Rafael Eleuterio – Sólo salió en 1972.

 

El sudario era el antiguo de la Samaritana que Pedro Espinosa Molina le había pedido prestado al Cabildo de Mesa. La cofradía lo concedió con la condición de que no se deteriorara la pintura central. Ascensión Pérez de Espinosa la tapó con un paño blanco y la Cruz de Santiago en fieltro rojo. Dicha pintura, obra de Adela Lázaro Tudela, que representaba el pasaje de Jesús y la Samaritana junto al pozo de Jacob, no volvió a ser vista por los cartageneros hasta 2020 cuando fue descubierta con motivo de la exposición conmemorativa "75 aniversario de la imagen de La Conversión de la Samaritana de Sánchez Lozano", organizada por la Agrupación de San Pedro Apóstol.

 

Sudario de la Samaritana estrenado el Miércoles Santo de 1944. Pintura central tapada con la Cruz de Santiago.

 

El sábado 25 de marzo, víspera del Domingo de Ramos tuvo lugar, en la dársena del barrio de pescadores, la representación del Auto Sacramental “Génesis” obra del poeta Ángel J. García Bravo. Trataba sobre el desembarco de Santiago, por esta tierra, y su encuentro con la gente.

 

  Programa de “Génesis”.

 

El 28 de marzo de 1972 fue la 1ª salida de Santiago bajo la tutela de San Pedro. La procesión formó en la explanada de la iglesia de Santa Lucía. Paco Abad y Rafael Checa, ambos vestidos de nazarenos, fueron respectivamente vara de sudario y de tercio. Los sudaristas fueron: Pedro López Baquero, Pedro José Espinosa Pérez y José Arturo Botí.

Santiago sale el Martes Santo, a las 18:00 horas, de la plaza aledaña a la iglesia. Recorre algunas calles del centro del barrio;  Pl. de la Constitución, Peladilla, Molina y Santiago, entre otras.

 

1972 – Primera salida por las calles de Santa Lucía.

 

Se recogen de nuevo en la plaza de donde salieron y, desde allí, los penitentes fueron trasladados en autocar, de pie para no arrugarse la ropa, hasta el antiguo Parque de Bomberos situado junto al actual Hotel NH. Entraron a Bazán, por la antigua puerta, donde esperaron la llegada de los hachotes, que los traían en un camión, y del trono que se trajo por la Cuesta del Batel al muelle. De nuevo saldrían, sobre las 20:00 horas para buscar, por la calle Real, a San Pedro en la puerta del Arsenal, y por el recorrido habitual los dos fueron al encuentro de San Juan en la Plaza de San Sebastián. En 1973 sólo hay un cambio sustancial con respecto al año anterior; se sustituye la imagen de Rafael Eleuterio por el Santiago de la Santa Cena de Garcia Talens. Por lo demás, y en lo que respecta a la procesión, se repite prácticamente lo mismo que el año anterior.

Trono de San Pedro con la imagen del Santiago de la Santa Cena.

 

Ante el fallecimiento de Pedro Espinosa Molina, “alma mater” de la Agrupación de San Pedro, Francisco Abad abandona sus responsabilidades en Santiago lo que, sumado a otras circunstancias, supuso que en 1974 Santiago no procesionase.

En 1975, bajo la presidencia de Damián Romero López, Santiago deja de procesionar por el barrio de Santa Lucía, saliendo desde el Cuartel de Instrucción, y el trono desde la puerta de Bazán. Tras el sudario de la Samaritana, los jóvenes san pedristas visten con la tradicional túnica de terciopelo rojo, capa y capuz de raso blanco y fajín blanco. Debido al incremento en el número de penitentes, y como novedad, se incorpora un nuevo grupo, que abre marcha con dalmáticas rojas, túnica y capuz blanco y fajín rojo. Este grupo lleva como sudario el que Santiago sacó en los años 65-69  -cuando dependía de la Agrupación de la Coronación de Espinas y, posteriormente, de la Santa Cena- un paño blanco con la cruz de Santiago en fieltro rojo. Por la calle Real va a reunirse con San Pedro, y ambos con San Juan en el cruce de Castellini.

 

 

Puerta del CIM.

 

La directiva san pedrista, y a través del sacerdote Antonio Pérez Madrid, le encarga una imagen de Santiago a José Sánchez Lozano, al precio de 60.000 ptas., pero advierte el escultor que no podrá entregarla hasta 1977.

En 1976 se produce un hecho importantísimo, en el devenir de esta Agrupación, y que sigue marcando su historia. El gran californio, Capitán del Ejército de tierra, D. José Muñoz Domínguez  firma los protocolos para que el Santiago pueda salir, en lo sucesivo, del Gobierno Militar. Igualmente el Gobernador Militar; D. Máximo Alomar Josa da su permiso para que Santiago salga de ese recinto.

La vinculación que se establece, entre Santiago y el Gobierno Militar, es importantísima en un Martes Santo en que los otros dos apóstoles están vinculados a estamentos militares. De esta manera los san pedristas, bajo el mandato de Damián Romero, conseguimos un logro importantísimo para el Santiago y es que dicha agrupación quede vinculada,  para siempre, al Gobierno Militar.

El periódico de tirada nacional “La Vanguardia”, y el local “La Verdad”, se hacen eco de esta información y dicen que Santiago salió, este año, del Gobierno Militar. El recorrido fue: bajada de la Muralla por; Príncipe de Vergara, Cañón, Pl. Ayuntamiento, Alcalde Zamora y por calle Real hasta el Arsenal para unirse a San Pedro.

 

Salida del Gobierno Militar.

 

En 1977 es nombrado Presidente de la Agrupación de Santiago el san pedrista José Ramón Bustillo Navia-Osorio.

La nueva imagen de Santiago es obra del escultor José Sánchez Lozano. Fue bendecida en la Salve Grande el 23 de marzo de este año. Lleva un libro en la mano con la frase: “Ex hoc loco orta fuit  Hispaniae  lux evangélica”  (De este lugar brotó la luz evangélica de España), frase que encontramos en la iglesia de Santa Lucia.

El vestuario del santo se componía de túnica de terciopelo rojo con ribetes dorados y botonadura de cristal de roca. Manto de terciopelo blanco, con ancha orla, y cordón dorado a la cintura. El vestuario fue realizado por Federico Vilar. Todo él sobre una camisa interior realizada por Dª. María Dolores Robles Roca.

 

Nueva imagen y vestuario de Santiago en 1977.

 

En 1978 el san pedrista  José Ramón Bustillo Navía-Osorio presidia el Santiago, junto  a un nutrido grupo de nuestra agrupación. No hubo incidencias dignas de resaltar. El recorrido fue de Príncipe de Vergara, Cañón, Alcalde Zamora a Real, para reunirse con San Pedro en el Arsenal.

 

 

En 1979, la directiva san pedrista, de la Agrupación de Santiago, a través de su Presidente José Ramón Bustillo, solicita, a la Casa Real, que S.M. el Rey fuera Presidente de Honor de la misma. El 22 de marzo, de ese año, se recibe oficio de la Casa Real, firmado por el Jefe de la misma, comunicando la aceptación por parte de Su Majestad.

 

Escrito, del Jefe de la Casa Real, con la aceptación de S. M. El REY de la Presidencia de Honor de Santiago.

El 28 de marzo, del mismo año, se recibe escrito, confirmando lo anterior, y un dibujo del Escudo Real por si fuera oportuno usarlo en la agrupación. En cuanto al uso de los distintivos, de los diversos Cuerpos y Armas del Ejército, nos remite al Jefe del Estado Mayor del Ejército: D. Tomás de Liniers Pidal.

 

 

En abril del 79 el General Jefe del Estado Mayor del Ejército remite al san pedrista  José Ramón Bustillo Navia-Osorio –Presidente de Santiago– permiso para que los distintos Escudos y Armas del Ejército puedan bordarse en el manto del santo.

 

Escritos autorizando el uso del Escudo Real y de las distintas Armas y Cuerpos del Ejército.

 

El 7 de marzo de 1980, y aprovechando una visita que hacían los Reyes a nuestra ciudad, en el palacio consistorial, se le entrega a Su Majestad D. Juan Carlos I el nombramiento, otorgado el año anterior, de Presidente de Honor de la Agrupación de Santiago, junto con la Medalla de la Cofradía con el rango de Mayordomo Honorario. Asimismo, se le hace entrega a  S. M. Doña Sofía del escudo de Oro de la agrupación.

La comisión california iba presidida por: el Hermano Mayor; D. Juan Alessón , el Presidente de Santiago; D. José Ramón Bustillo Navia-Osorio, el Presidente de San Pedro Apóstol; D. José María Navia-Osorio, el Alcalde de Cartagena y también san pedrista, D. Enrique Escudero de Castro, y otros cargos directivos.

 

Momento de la visita de S.S. M.M. los Reyes a Cartagena.

Santiago ese Martes Santo hizo un nuevo recorrido y desfiló por: Príncipe de Vergara, Cañón, Aire, Plaza San Sebastián, Villamartín, Plaza del Rey (este y sur) a puerta del Arsenal, donde se reúnen con San Pedro, y ambos con San Juan en la Plaza de San Sebastián.

En 1981 no hay ninguna variación digna de mención. Los tres apóstoles salen de sus respectivos “acuartelamientos” y  todo se lleva a cabo de la forma habitual.

En 1982 se nombra Presidente a  D. Francisco Cerón Albacete. Este año se estrenan los nuevos hachotes, y varas de Santiago, realizados por la Casa Orrico de Valencia, según dibujo de Alfonso Romero Solana. Llevan varas salomónicas, con vieiras invertidas y la cabeza de tres caballos, tubo central iluminado y rematado por adornos con la Cruz de Santiago.

En plenas Bodas de Oro de San Pedro, y en la Cena de las Damas de Santiago, celebrada en el Hotel Alfonso XIII, el Sábado de Pasión 6 de Abril de este año, el nuevo Presidente se levanta y pide la “independencia” para la Agrupación de Santiago Apóstol.

 

El tercio de Santiago con los nuevos hachotes. Se aprecia en la foto como, por la inclinación de los tambores y el fondo de la calle, la procesión viene por Villamartín.

 

El 10 de mayo de 1982 hay una reunión, en la Sala Capitular de la Cofradía California, presidida por el Hermano Mayor, D. Pablo Francisco López Álvaro, el Presidente de San Pedro, D. José María Navia-Osorio y el Presidente de Santiago, D. Francisco Cerón, en presencia  de varios directivos san pedristas y mayordomos de Mesa de la cofradía. El único tema a tratar; la independencia de Santiago respecto a la de San Pedro. Finalmente fue otorgada aunque no fue total  ya que, de una forma encubierta y no hecha pública, seguía ligada a San Pedro a través de un documento, no oficial, firmado por las tres partes.

El 10 de mayo de 1982 se firma un documento no oficial – sin membretes, ni sellos, ni aclara firmas - por el cual:

1º.- La Agrupación de San Pedro concede la independencia a la de Santiago.

2º.- La Agrupación de Santiago se compromete a nutrirse totalmente de la de San Pedro, siempre que esta les proporcione los penitentes necesarios.

3º.-Caso de que Santiago no saliese con la dignidad, y el esplendor propio de las procesiones californias, volvería bajo el patrocinio de San Pedro, no pudiendo pasar a formar parte de ninguna otra agrupación.

 

Escrito, no oficial, firmado por el Hermano Mayor y los dos Presidentes.

 

Además, se hace otro escrito por el cual la cofradía, a través de nuestro Hermano Mayor, se compromete a facilitar la formación de un nuevo tercio cuando la Agrupación de San Pedro lo solicitase. La cofradía respetó ese acuerdo años después cuando, en el Cabildo del Coto Dorda, San Pedro solicitó la creación de un tercio femenino y le fue concedida.

 A partir de 1983, y en los siguientes años, fueron muchos los san pedristas jóvenes que siguieron saliendo, y forjándose en Santiago, hasta que les llegó la hora de pasar a nuestra Agrupación. El incremento en el número de trajes del Tercio de San Pedro supuso el cese de la presencia de san pedristas en las filas del tercio santiaguista.

 La historia, en resumen, de más de una década, en la cual el Santiago, tutelado por la Agrupación de San Pedro, y bajo la batuta de presidentes y directivos san pedristas, creció y alcanzó logros fundamentales como la nueva imagen de Sánchez Lozano, los vínculos con el Gobierno Militar y la aceptación por SM el Rey de la Presidencia de Honor. Un hito más en la historia san pedrista que sirvió para engrandecer, aún más, el patrimonio de la Cofradía California y de la Semana Santa de Cartagena.